INTRODUCCIÓN
Hoy empieza nuestro
renuevo en el Señor, para alcanzar todo aquello que no hemos alcanzado. Cada uno de los planes que tenemos los
vamos a alimentar con la visión y las promesas de Dios.
Salmos 18:6 (LBLA)
“En mi angustia invoqué al Señor, y clamé[a] a mi Dios; desde su
templo oyó mi voz, y mi clamor delante de Él llegó a sus oídos.”
Salmos 34.17 (LBLA)
“Claman los justos, y el Señor los oye, y los libra de todas sus
angustias.”
Salmos 55.22 (LBLA)
“Echa sobre el Señor tu carga, y El te sustentará; El nunca
permitirá que el justo sea sacudido.”
2 Corintios 1.3-4 (DHH)
“3 Alabado sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, pues él
es el Padre que nos tiene compasión y el Dios que siempre nos consuela. 4 Él
nos consuela en todos nuestros sufrimientos, para que nosotros podamos consolar
también a los que sufren, dándoles el mismo consuelo que él nos ha dado a
nosotros.”
Isaías 41.10 (LBLA)
“No temas, porque yo estoy contigo; no te desalientes, porque yo soy
tu Dios. Te fortaleceré, ciertamente te ayudaré, sí, te sostendré con la
diestra de mi justicia.”
Salmos 30.5 (LBLA)
“Porque su ira es sólo por un momento, pero su favor es por toda una
vida; el llanto puede durar toda la noche, pero a la mañana vendrá el grito de
alegría.”
Salmos 30.11 (LBLA)
“Tú has cambiado mi lamento en danza; has desatado mi cilicio[a] y
me has ceñido de alegría;”
Isaías 43.18-19 (RV60)
“18 No os acordéis de las cosas pasadas, ni traigáis a memoria las
cosas antiguas. 19 He aquí que yo hago cosa nueva; pronto saldrá a luz; ¿no la
conoceréis? Otra vez abriré camino en el desierto, y ríos en la soledad.”
Filipenses 3.13-14 (TLA)
“13 Hermanos, yo sé muy bien que todavía no he alcanzado la meta;
pero he decidido no fijarme en lo que ya he recorrido, sino que ahora me
concentro en lo que me falta por recorrer. 14 Así que sigo adelante, hacia la
meta, para llevarme el premio que Dios nos llama a recibir por medio de
Jesucristo.”
Filipenses 3.13-14 (PDT)
“13 Hermanos, no considero haber llegado ya a la meta, pero esto sí
es lo que hago: me olvido del pasado y me esfuerzo por alcanzar lo que está
adelante. 14 Sigo hacia la meta para ganar el premio que Dios me ofreció cuando
me llamó por medio de Jesucristo.”
DESARROLLO
En el año del “Renuevo”, Dios está ofreciendo una nueva y gran oportunidad para muchos de
nosotros que nos hemos quedado detenidos y ligados a aquello que nos sucedió desde
hace mucho tiempo, pero hoy Dios nos dice “Yo hago cosa nueva para vos”.
Posiblemente lo negativo que nos aconteció nos paralizó y
nos estanco pero la vida continua, y por lo tanto tenemos que dejar el pasado y
extendernos hacia lo que está delante porque Dios tiene grandes propósitos para
nosotros!
Lo que te paso déjalo atrás ¿Por qué? ¡Porque hay algo
grande de parte de Dios que te espera! Pero es necesario despegarse del pasado.
Si seguimos recordando lo negativo del pasado, Él no podrá hacer nada nuevo.
Tampoco tenemos que traer a memoria las cosas que
pertenecen al pasado. Hagamos todo lo posible por enfocarnos en el futuro y no
en el pasado. “No os acordéis de las cosas pasadas, ni traigáis a memoria las
cosas antiguas” (Isaías 43:18)
Y es necesario aprender a entresacar lo bueno de lo malo
que haya pasado. Hay algo precioso que Dios hizo en su vida en el tiempo
difícil. Aprenda a destacar lo bueno de lo malo. “Por tanto, así dijo Jehová: Si te convirtieres, yo te restauraré, y
delante de mí estarás; y si entresacares lo precioso de lo vil, serás como mi
boca. Conviértanse ellos a ti, y tú no te conviertas a ellos” (Jeremías 15:19).
El Renuevo involucra tres bendiciones
asombrosas.
- · Nuevas y grandes oportunidades
- · Un cambio de estado
- · Convertirte en un milagro
Cuatro cosas que vamos a tener que empezar a
hacer.
- Romper reglas.
- Perdonar más rápidamente.
- Besa despacio, ama de verdad.
- Reír sin censura y nunca dejes de sonreír.
1.Romper
reglas. Tenemos que
romper las reglas que fueron formadas por las malas experiencias que tuvimos, y
además porque hay bendiciones que requieren que se rompan estas reglas.
Ejemplo, tenemos que aprender a romper el
techo que nos limita.
Marcos
2.1-5 (LBLA)
“Habiendo
entrado de nuevo en Capernaúm varios días después, se oyó que estaba en casa. 2
Y se reunieron muchos, tanto que ya no había lugar ni aun a la puerta; y El les
exponía[a] la palabra. 3 Entonces vinieron* a traerle un paralítico llevado
entre cuatro. 4 Y como no pudieron acercarse[b] a Él a causa de la multitud,
levantaron el techo encima de donde El estaba; y cuando habían hecho una
abertura, bajaron la camilla en que yacía el paralítico. 5 Viendo Jesús la fe
de ellos, dijo* al paralítico: Hijo, tus pecados te son perdonados.”
Ejemplo,
tenemos que aprender a salir de la barca para caminar en fe.
Mateo14.27-29
(LBLA)
“27 Pero enseguida
Jesús les habló, diciendo: Tened ánimo, soy yo; no temáis. 28 Respondiéndole
Pedro, dijo: Señor, si eres tú, mándame que vaya a ti sobre las aguas. 29 Y El
dijo: Ven. Y descendiendo Pedro de la barca, caminó sobre las aguas, y fue
hacia Jesús.”
2.Perdonar
más rápidamente. Necesitamos
aprender del ejemplo de José, porque él llego a la concreción de su propósito
cuando aprendió a perdonar. Dios tiene un propósito muy grande para nosotros
pero quizás nos este faltando aprender a perdonar. Porque la vida se pasa
rápido y hay bendiciones que nos estamos disfrutando por no aprender a
perdonar, por eso el poder del perdón necesita ponerse en acción más rápido.
3. Besa
despacio, ama de verdad.
Cantares
1.2 (PDT)
“Cúbreme con tus besos, porque tu amor es más dulce que el vino.”
Aquí la relación entre la sulamita y el amado
tipifica la relación de la iglesia con Cristo. No se tiene que perder el
romance y los amoríos en una relación matrimonial y menos en la relación con
nuestro amado. En el año del renuevo Él quiere renovar nuestras relaciones,
porque hay bendiciones que Dios nos manda en forma de personas.
4. Reír
sin censura y nunca dejes de sonreír.
Salmos
126.1 (LBLA)
“Cuando Jehová hiciere
volver la cautividad de Sion, Seremos como los que sueñan.”
En este año del renuevo Dios trae sueños a tu
vida, Él te trae libertad. Él te dará razones para volver a reír. ¡Sueños
imposibles! ¡Arboles en el mar!
CONCLUSIÓN
FINAL
Esto implica que es un año de restauración y esperanza de
tal manera que esa es la visión que vamos a desarrollar en este tiempo. Un año de
saber que, el que de alguna forma llegó tal vez a niveles más bajos, si es hijo
de Dios, volverá a resurgir, reverdecerá y volverá a ser instalado para que le
siga sirviendo al Señor como lo había hecho antes.
¡Esperamos que todos podamos
correr sobre esta unción y visión en el 2019!
Ptr Gral Martín Salazar
No hay comentarios:
Publicar un comentario