Apóstol Sergio G. Enríquez O.
No podemos dejar de mencionar que vivimos el
final de los tiempos; basta con darle un vistazo a los matutinos
internacionales para enterarnos de los acontecimientos a nivel mundial y
compararlo con la profecía bíblica, para poder saber que estamos en el final
del fin de los tiempos; sin embargo, también debemos saber que Dios ha
prometido un avivamiento en el que primeramente las familias serían
restauradas, pero no podemos olvidar las advertencias que le hicieron a Israel
porque lo que ellos padecieron, quedó como enseñanza de lo que nosotros
podríamos vivir si no escuchamos la voz de Dios. Vemos entonces las
consecuencias de lo que Israel están viviendo precisamente en el momento cuando
Jesús estuvo entre ellos; y de pronto notamos cómo es que Jesús lamenta lo que
ellos vivían; pero ese lamento lo hace llorando porque lo que ellos padecían,
no era lo que Dios había querido para ellos, sin embargo todo fue como
consecuencia del comportamiento que Su pueblo había tenido:
Lucas 19:37-44 LBLA Cuando ya se acercaba, junto a la bajada del monte de los Olivos,
toda la multitud de los discípulos, regocijándose, comenzó a alabar a Dios a
gran voz por todas las maravillas que habían visto, 38 diciendo: ¡BENDITO EL
REY QUE VIENE EN EL NOMBRE DEL SEÑOR! ¡Paz en el cielo y gloria en las alturas!
39 Entonces algunos de los fariseos de entre la multitud le dijeron: Maestro,
reprende a tus discípulos. 40 Respondiendo El, dijo: Os digo que si éstos
callan, las piedras clamarán. 41 Cuando se acercó, al ver la ciudad, lloró sobre
ella, 42 diciendo: ¡Si tú también hubieras sabido en este día lo que conduce a
la paz! Pero ahora está oculto a tus ojos. 43 Porque sobre ti vendrán días,
cuando tus enemigos echarán terraplén delante de ti, te sitiarán y te acosarán
por todas partes. 44 Y te derribarán a tierra, y a tus hijos dentro de ti, y no
dejarán en ti piedra sobre piedra, porque no conociste el tiempo de tu
visitación.
Notemos que Jesús
le está hablando al pueblo de Israel, no está hablando con cualquier pueblo, le
hablaba al pueblo que había sido instruido de acuerdo a lo que Dios quería que
hicieran en su religión, pero no una religión hipócrita porque en aquel
entonces no era ese el trasfondo de la religión; por otro lado vemos que aquí
es una de las veces cuando Jesús llora y hace remembranza de lo que el pueblo
de Israel había hecho durante mucho tiempo y que como consecuencia no pudieron
notar el tiempo de Su visitación; eso hizo que Jesús se lamentara porque está
viendo lo que ellos vivían y todo era consecuencia de lo que hicieron por no
obedecer a Dios.
Ahora bien, lo
que Jesús lloró por Israel en aquel entonces, tiene que ser una semblanza para
la Iglesia de Cristo en este tiempo porque parecería que después de todo lo que
hemos visto en la manifestación de Dios en medio de Su Iglesia; mucho de Su
pueblo espiritual aun siguen jugando con el pecado y la religión pero esta vez
sí a la religión hipócrita donde se cree que por llevar la Biblia en la mano y
llegar a la Iglesia todos los domingos, con eso es suficiente, cuando la verdad
es que debemos empezar por morir a nosotros en todo, para que no haya estorbo
alguno que nos desvíe la atención de lo que Dios nos quiere hablar como parte
del plan a seguir diariamente, porque así como nosotros estamos buscando
consagración a Dios y El está constantemente enviando Su advertencia a nuestra
vida; el enemigo también está lanzando su engaño para que los cristianos que
están jugando con el pecado y jugando a la religión evangélica; sean envueltos
en ese engaño y desviado su corazón, convirtiendo entonces la adoración a Dios,
en un espectáculo público al estilo del mundo.
Lamentablemente
los afanes de este mundo están cada vez más sutiles para que la Iglesia sea
engañada y que entonces aquello en lo que tengamos el corazón, el enemigo lo
atrape y que como consecuencia nos roben la paz por la pérdida de nuestros
bienes y seamos entrampados con deudas y muchas otras cosas.
Lucas 19:42-44 LBLA ...diciendo: ¡Si tú también hubieras sabido
en este día lo que conduce a la paz! Pero ahora está oculto a tus ojos. 43
Porque sobre ti vendrán días, cuando tus enemigos echarán terraplén delante de
ti, te sitiarán y te acosarán por todas partes. 44 Y te derribarán a tierra, y
a tus hijos dentro de ti, y no dejarán en ti piedra sobre piedra, porque no conociste
el tiempo de tu visitación.
Esto es una
advertencia para la Iglesia, porque si todo lo que el Israel natural hizo fue
para que nosotros no lo hiciéramos; lo que estos versículos nos están diciendo
es que si no encontramos la paz, encontraremos destrucción, lo cual podemos
verlo contextualmente en el siguiente versículo:
Hebreos 12:14 LBLA Buscad
la paz con todos y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor.
De tal manera que
si nosotros encontramos lo que conduce a la paz, hallaremos santidad y vida
eterna.
¿QUÉ
NOS CONDUCE A LA PAZ?
LA
JUSTIFICACION
Romanos 5:1 LBLA Por tanto, habiendo
sido justificados por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro
Señor Jesucristo...
Por la
justificación seremos conducidos a la paz, pero no justificados por nosotros
mismos, porque no se trata que al momento en que nos encuentren en algún
pecado, busquemos la forma de justificarnos para encontrar paz; porque
lamentablemente cuando alguien es sorprendido en situaciones incorrectas,
nuestra humanidad lo primero que hace es justificarse de cualquier error,
porque a nadie le gusta atravesar ese tipo de situaciones; pero es entonces
cuando necesitamos morir a nuestras propias justificaciones y buscar a Dios
para que el Padre nos vea a través de nuestro Señor Jesucristo y que de esa
forma seamos justificados pero viendo hacia la cruz y que El nos vea el corazón
de la forma en que reconocemos nuestra situaciones pecaminosa, con lo cual
podemos decir que tenemos paz. Otro punto es que debemos reproducir la paz que
Dios nos permite tener para que como una semilla que es sembrada, pueda ser
reproducida.
LAS
ACCIONES JUSTAS
Apocalipsis 19:8 ...y le fue dado
vestirse de fino lino limpio, pues el fino lino son las justificaciones de los
santos.
Cuando estamos
haciendo una acción justa, eso nos está justificando, lo cual podemos verlo en
el siguiente versículo:
Santiago 2:24 LBLA Vosotros veis que el
hombre es justificado por las obras y no sólo por la fe.
Esto nos deja ver
entonces que no podemos cerrar nuestros ojos a la necesidad de la gente que
veamos en la calle y que de alguna manera podamos discernir que la situación
que vemos es para que seamos movidos y hagamos buenas obras pero sin estar
pidiendo cuentas a nadie antes de hacer las obras.
CON
PROCLAMAS DE PAZ
Mateo 10:13 LBLA Y si la casa es
digna, que vuestro saludo de paz venga sobre ella; pero si no es digna, que
vuestro saludo de paz se vuelva a vosotros.
Mateo 10:13 NVI Si el hogar se lo
merece, que la paz de ustedes reine en él; y si no, que la paz se vaya con
ustedes.
Aquí lo que vemos
son ministros pacificadores saludando con decretos de paz y si la casa donde se
proclama la paz es digna, la paz quedará ahí, pero la pregunta entonces es:
¿qué es la dignidad?, son los que no manchan sus vestiduras, según lo vemos en Apocalipsis 3:4.